Hola amigas y amigos. Tu, yo y todos los Venezolanos estamos pasando por un inmenso duelo. Imagínate por un momento que a pesar de todos tus esfuerzos para evitarlo, tu madre está enferma y en peligro de morir, y se encuentra en medio de un profundo sufrimiento (Dios no lo permita). Ella sufre de una extraña enfermedad de la que hay muy poca experiencia médica. Los médicos hasta ahora han aplicado remedios que en un momento te dieron la esperanza de que habría una recuperación. Contra todos las expectativas que esos pronósticos crearon, recayó. Ahora ellos te proponen un tratamiento que tú consideras tardío, ineficaz e insuficiente. Cómo te sentirías? Qué harías? Te sentirías tal cual como te sientes en este momento. No es para menos.
"Sentimos que hemos perdido a nuestra madre patria. Del hospital nos han devuelto a alguien totalmente extraño que no logramos reconocer y ahora los médicos nos sugieren un tratamiento que consideramos que no es efectivo para la gravedad de la enfermedad. Qué hacemos? La dejamos morir? Seguimos culpando a los médicos por el estado en que está y permanecemos sin hacer nada? O nos aferramos a esa mínima esperanza y procedemos a hacer algo?"
Esta es una enfermedad terminal que no mata al enfermo, lo deja sufriendo por el resto de su vida. Y la única posibilidad que hay de sanarlo es seguir atacando al tumor con lo que hay - con lo que tenemos a nuestra disposición, con los médicos, las medicinas, y los tratamientos que tenemos, así no nos gusten. Porque hay una realidad y es una sola. Si no hacemos algo con lo único de que disponemos ahora en este momento, que es nuestra mayoría, cuando lo vamos a hacer? Cuando todo esté perdido?
"Aunque así lo creas en este momento por el dolor, frustración y rabia que sientes por lo que pasó el 30 J , NO ESTAMOS PERDIDOS!. Lo estaremos si seguimos anclados en nuestra queja sin hacer nada."
El objetivo del régimen es matar nuestra esperanza. Ellos saben que sin esperanza no hay futuro. Ellos quieren una tierra de zombies, como en Cuba. Allí el pueblo aprendió a perder la esperanza. Esa es la desesperanza aprendida. Aquí están a punto de que la perdamos. Ellos saben lo que hacen, y nosotros somos seres humanos, no super héroes con inmunidad a ese mal. Es natural y humano reaccionar como lo estamos haciendo, ellos lo saben. Esa reacción la superaremos con el tiempo, como pasa en los duelos. Pero tiempo es lo que no tenemos. Por eso adelantaron las elecciones, para agarrarnos indefensos en medio de nuestro duelo.
"Este es un asunto personal e individual de cada ciudadano y su conciencia. Yo no sé que van a hacer los demás. Pero yo no voy a permitir que maten mi esperanza!"
Yo soy vulnerable, estoy consciente de ello. Mi enemigo, como un boxeador cuyo rival tiene cortado el entrecejo, me va a seguir pegando allí hasta que yo no aguante más y tire la toalla. El árbitro está vendido, es un hecho, y va a dejar que el otro me siga dando golpes bajos e ilegales. Lo que buscan es que tire la toalla. Pero no la voy a tirar aunque apenas me pueda mantener en pié, porque yo sé que mi enemigo tiene quijada de cristal, un golpe bien dado allí lo dejará tambaleándose. A pesar de que yo esté contra las cuerdas y sangrando tan profusamente que apenas puedo verlo, aún tengo dentro de mí ganas de vivir y energía para ese golpe, lo que tengo que hacer es seguir de pié. Aguantar otro golpe más, hasta que tenga su quijada a mi alcance. para eso tengo que hacer un esfuerzo, un gran esfuerzo, todo mi cuerpo me pide tirar la toalla, estoy agotado, acabar con esta tortura será un alivio, pero no lo voy a hacer. Estoy contra las cuerdas, pero sé que tengo fuerza para un golpe, un golpe más, eso es todo lo que necesito. Un uppercut bien dado contra esa mandíbula de cristal con toda la energía que me resta es todo lo que necesito. Muhammad Ali ganó un campeonato mundial así. Porque yo no?
"Mi voto es el uppercut contra la mandíbula de cristal del régimen, tiene el poder de una bomba atómica. Voy a bajar los brazos y tirar la toalla? No! Nunca! Yo no lo haré!. Lo harás tú? No lo creo! Así que levanta la cabeza y lanza ése golpe conmigo"
La realidad, y la única verdad que existe es que tenemos dos opciones. Únicamente dos. O votamos o no votamos. Si votamos, mantenemos vivo al paciente y ponemos al régimen contra las cuerdas otra vez. Como están las cosas es cuestión de tiempo para encontrar una cura. Si con nuestra mayoría ciudadana votamos, habremos ganado otro round. Si nos hacen trampa, se hundirán en su propio fango. Pero si no votamos, si tiramos la toalla, convertiremos a Venezuela con nuestra abstención, en un país de zombies. El poder lo tenemos nosotros, los ciudadanos, pero también la responsabilidad. Nosotros haremos que eso pase o no. No el régimen, tampoco la MUD. Pero sin la MUD, no podemos ejercer nuestro poder. El poder del voto. Así que decide, porque después, a quién vas a culpar? Si esa hora llega, no tendrás más alternativa que señalar al responsable mirándote en el espejo.
"Tirando la toalla habremos apagado con nuestra omisión y abstención, la única esperanza que nos queda. Como dije antes, esto es un asunto personal e individual. Es mi asunto! Así que yo voto! Por mí no se perderá esa esperanza, votaré así sea el único que lo haga. Allá los demás con su conciencia."
Dios nos bendiga a todos.
Helio Borges
